La ONU cree que la revolución de las finanzas digitales puede ser una herramienta clave para ayudar a los más necesitados y hacer un mundo mejor, apoyando el cumplimiento de su agenda de Desarrollo Sostenible, según defiende en un informe publicado este miércoles.
“Las tecnologías digitales, que están revolucionando los mercados financieros, pueden ser algo revolucionario para cumplir con nuestros objetivos comunes”, defendió el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, que presentó el documento.
La organización apunta que la crisis del coronavirus ha acelerado los progresos en el ámbito de las tecnologías financieras y ha mostrado con claridad el papel que este sector puede tener a la hora de apoyar a negocios y proteger empleos alrededor del mundo.
“Nuestra respuesta a la actual crisis sin precedentes demuestra cómo la digitalización puede usarse para apoyar a los vulnerables, reducir desigualdades, apoyar los sustentos y reforzar la solidaridad”, señala el documento, redactado por un grupo de expertos y personalidades de distintos ámbitos.
Para la ONU, la actual revolución tecnológica ofrece una “oportunidad única para remodelar las finanzas” y asegurar que el dinero de inversores y contribuyentes se dirija a ámbitos que responden a las necesidades de la mayor parte de la población.
Según la organización, esas necesidades comunes están recogidas de forma colectiva en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), la gran agenda contra la pobreza y en favor de la salud, la educación y el medio ambiente pactada por todos los países de Naciones Unidas.
Esas metas, hasta ahora, se han encontrado con un déficit de financiación para poder hacerse realidad, pero según la ONU el mundo cuenta con dinero de sobra para lograr que se cumplan.
Así, el informe apunta a la importancia de “alinear” las grandes cantidades de dinero que fluyen por los mercados financieros globales con las metas recogidas en los ODS.
Y en ese objetivo, considera que la generalización de las finanzas digitales puede ser fundamental, entre otras cosas porque ofrece a los ciudadanos más capacidad para decidir qué hacer con sus ahorros e inversiones.
“La revolución de las finanzas digitales ofrece una oportunidad única para reconectar a la gente con su dinero”, explicó a los periodistas Achim Steiner, el administrador del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y copresidente del grupo encargado de elaborar el informe.
La ONU apunta que, gracias a las nuevas tecnologías, resulta mucho más fácil para cualquiera tomar decisiones sobre el destino de su dinero y, por tanto, ayudar a que se protejan los intereses de grupos más amplios y no sólo de ciertas élites.
“Las finanzas digitales, que en esta crisis se han convertido en un salvavidas para millones de personas en todo el mundo, extienden los límites de la inclusión financiera dando poder a los ciudadanos como ahorradores, inversores, prestatarios, prestamistas y contribuyentes de una forma que les da variedad y poder sobre su dinero”, señaló la otra copresidenta, la portuguesa Maria Ramos.
La ONU también ve en la digitalización una gran vía para que los fondos que se mueven en los mercados financieros respalden las prioridades de desarrollo, recordando que ya hay unos 30 billones de dólares de inversiones en los mercados de bonos y acciones alineados con los ODS, pero que esa cantidad está lejos de los más de 185 billones que hay en total.
Al mismo tiempo, la organización advierte de que la revolución digital también plantea riesgos y puede hacer aumentar la exclusión, la desigualdad y la división si no se toman las medidas adecuadas.
Así, el informe subraya que aprovechar la digitalización para “hacer el bien” es una “elección” y no algo que ocurrirá de forma inevitable por la tecnología.